La era de la responsividad
Para todos los que hemos invertido en crear nuestro sitio web en los últimos tiempos, nos llega una verdad irrefutable que no podemos dejar de lado: tenemos que actualizarla. Y no lo dicen los expertos, ni los gurús, ni las modas... lo dicen las estadísticas.
En menos de dos años, más del 50% del tráfico de usuarios que visitan webs lo hace a través del móvil. Y no lo decimos nosotros (tampoco), lo dicen las conclusiones de numerosos estudios realizados, como el de IAB Spain sobre Mobile Marketing: en 2014 habrá más personas que naveguen con móvil que con ordenador. En 2015, cada persona del mundo tendrá un smartphone.
Cifras, cifras y más cifras
Los datos que arroja el estudio del IAB Spain (Fuente: Interactive Advertising Bureau) son demoledores.
La realidad supera a la ficción y lo que a todos nos parece más cómodo, que es navegar con una pantalla de 19, 21 o 23 pulgadas, muchas personas lo substituyen por la comodidad del navegar en el momento que quieran, desde el lugar que quieran.
Acceso diario a internet
- Portátil: 86%
- Smartphone: 88%
- Tablets: 45%.
Fuente: IAB Spain
Experiencias y expectativas
- Las búsquedas móviles se han cuadriplicado desde 2010
- El 57% de usuarios no recomendaría un web con mala versión para smartphones
- Un 60% espera que un web para móvil cargue en 3 segundos o menos
- El 78% intentará acceder a un web un máximo de 2 veces
- Ante un web no adaptado para móviles, el 40% se iría a la competencia
- Conversión en compras: el 50% de las búsquedas mediante móvil
Pero, ¿qué es un web adaptativo?
Un web responsivo o adaptativo (responsive en inglés) es un web programado de tal manera que adapta su interfaz, es decir, lo que vemos, al formato de pantalla de cada dispositivo. De esta forma podemos verlo tanto en ordenador de sobremesa o portátil, como también en una tableta o móvil.
Y, lo más importante, es que se puede utilizar igual de bien en todos los formatos. Es decir, no es que veamos el mismo web más grande o más pequeño, si no que se personaliza de tal manera que nuestros visitantes pueden hacer clic en un botón tanto con el cursor del ratón como con su propio dedo.